Dejar el alcohol

Dejar el alcohol

La principal causa de alcoholismo es la capacidad adictiva del alcohol, que la mayoría de veces se minimiza. La genética hereditaria, la vulnerabilidad individual y el grado, frecuencia y tiempo de de consumo determinarán su aparición.

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El alcohol crea dependencia en la persona que lo consume y afecta al Sistema Nervioso Central perjudicando gravemente la salud física y mental de un individuo. Es, además. la droga más consumida en España, de la que más se abusa y la que más problemas sociales y sanitarios ocasiona a las personas. La Organización Mundial de la Salud (OMS) confirma que esta sustancia es la responsable de más de 2,5 millones de muertes al año.

Sobre un 65% de la población realiza consumos de riesgo, aunque solo un 10 % de estos se ponen en tratamiento por alcoholismo: una alteración en el cerebro que hace difícil controlar la ingesta de bebidas alcohólicas y cuya primera característica es la propia negación de la enfermedad.

Al contrario de lo que piensa la mayoría de la población el alcohol es una droga.

La principal causa de alcoholismo es la capacidad adictiva del alcohol, que la mayoría de veces se minimiza. El riesgo de que una persona se convierta en alcohólica depende de factores biológicos, sociales, culturales y psicológicos. La genética hereditaria, la vulnerabilidad individual y el grado, frecuencia y tiempo de de consumo determinarán su aparición. 

A medida que el consumo persista se irán deteriorando la salud física y mental, además de todos los ámbitos (laborales, familiares y afectivos) de la persona que padece la adicción.

Sintomatología del alcoholismo

Problemas de memoria. Perdida de concentración.
Ansiedad, depresión, insomnio o irritabilidad (celos, paranoia)

Descoordinación motora, desnutrición, cardiopatías o problemas hepáticos.
Daños renales, digestivos. Cancer.

Esforzarse en abandonar el consumo sin conseguirlo.
Ocultar el problema, mentir y manipular situaciones.
Autojustificarse y seguir bebiendo (aunque sea sólo el fin de semana).

Cuando se empieza a beber, ser incapaz de parar.
Necesita más cantidad para sentir los mismos efectos.

Irresponsabilidad. Incumplimiento de los deberes. Falta de puntualidad.
Deterioro de relaciones sociales, familiares y laborales.

Tratamiento

Desintoxicación física con medicación para paliar los síntomas que aparecen cuando se interrumpe repentinamente la ingesta.

Mantenimiento de la abstinencia a partir de un tratamiento combinado farmacológico y psicológico.

Erradicación de la dependencia psíquica con la ayuda de terapias individuales y grupales donde se trabaja la motivación para la abstinencia, la prevención de recaídas y el afrontamiento de situaciones de conflicto.

Si tienes sospecha de alcoholismo, tuyo o de algún familiar, ponte en contacto con nosotros para un diagnóstico profesional. Nuestro equipo determinará el tratamiento más apropiado para cada persona y diseñará una terapia de rehabilitación personalizada para conseguir eliminar totalmente la adicción a la bebida.

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